miércoles, 7 de septiembre de 2011

ecosistema artificial


Con el paso de los años, los hombres fueron tomando los ecosistemas naturales para convertirlos en ecosistemas artificiales, y,  a partir de esta situación, se han generado y provocado diferentes consecuencias en el medio ambiente.
Dentro de estos ecosistemas artificiales, nombramos a los ecosistemas que fueron modificados para dejar lugar a los cultivos, crías de animales, represas e incluso a las ciudades. Uno de estos ecosistemas que el hombre adaptó es el agroecosistema, es decir, sistemas agrícolas ganaderos que se dedican a producir alimentos y fibras textiles.
Generalmente, estos ecosistemas reemplazan zonas de praderas y bosques naturales por campos de cultivo de una sola especie de planta. Esto se conoce como monocultivo y si bien son simples, no tienen la resistencia de los ecosistemas naturales porque allí hay pocas especies interactuando entre sí. Así mismo, estos ecosistemas artificiales necesitan de maquinarias para el cultivo, la irrigación, fertilización y plaguicida, las cuales requieren de un extra de energía que, en la mayoría de los casos, proviene de combustibles fósiles.
En el caso de que en estos ecosistemas haya animales (ganado) hay un sobrepastoreo que también incide en el medio, alterando las condiciones naturales, lo que se traduce en un debilitamiento del ecosistema.
También debemos referirnos a la degradación de los suelos por los ecosistemas artificiales. Por ejemplo, cuando los suelos son utilizados para la actividad agrícola, y no se realizan los controles necesarios, se producen ciertas alteraciones que conducen a la progresiva pérdida de fertilidad del suelo. Y si el suelo no es fértil, es prácticamente inservible para producir.

ecosistema aereo

Ya en el aire casi todas las grandes aves han aprendido a mantenerse con un mínimo de gasto energético; los albatros pueden pasar horas sin batir una sola vez las alas, y es porque conocen muy bien las zonas de viento en las cuales planean, a medida que pierden altura giran contra él y vuelven a ganar altura: lo logran gracias a la configuración de sus alas, curvas hacia atrás y de todos modos flexibles. Muchos albatros viven en zonas tan ventosas como la antártida; los primeros siete años de su vida casi no hacen otra cosa más que volar sin poner sus patas en tierra y descendiendo al mar ocasionalmente para alimentarse; llegada la edad madura se reúnen en tierra durante varias semanas, se aparean y crían a su único polluelo; luego retoman el vuelo hasta el año siguiente.

Para las aves alzar el vuelo es un poco más difícil, el despegue es siempre lo que más requiere energía: para ello necesita mucho oxígeno para alimentar el potente músculo que une el esternón con el ala, y por esto es que tiene un corazón enorme para su tamaño (el corazón de un gorrión es dos veces más grande que el de un ratón); como están cubiertas de plumas, un aislante muy eficaz, no necesitan calentarse para emprender el vuelo.
Pero para las aves más grandes, y por lo tanto más pesadas, emprender el vuelo no es una tarea tan fácil; muchas de ellas no pueden empezar a volar sin la ayuda del viento: lo típico es que corran contra él, formando colchones de aire que la elevan. El albatros viajero, de alas muy largas, no puede batir sus alas con rapidez: por eso habita siempre en lo alto de las quebradas, dejándose caer en el aire; cuando se juntan a vivir en grupos, suelen hacer fila para los despegues.

Los ríos se encuentran entre los ecosistemas naturales más intensamente usados por el hombre, lo mismo que los arroyos. Son aprovechados como abastecimiento y depósito de agua, producción pesquera, impulsadores de plantas hidroeléctricas.
Teniendo en cuenta el aspecto energético, estos ecosistemas son incompletos, debido a que en gran parte dependen del auxilio biológico de los ecosistemas adyacentes (bosques).
El equilibrio de éstos ecosistemas se está alterando en detrimento de muchos organismos, incluyendo la población humana que obtiene gran cantidad de alimento de este tipo de ecosistema acuático.

El tiempo de vida de las lagunas, varía desde unas pocas semanas, meses, hasta varios años. En los lagos se pueden localizaqr distintas zonas; entre ellas tenemos:
Zona Litoral:   Formada por vegetales y animales grandes presentes en las orillas.
Zona Limnética: Formada por agua superficiales en donde predominan el fito y zooplancton.
Zona Profunda: Donde sólo se encuentran animales, no hay vegetales, puesto que a ella no llegan los rayos solares.

ecosistema acuatico


Anteriormente se analizó la energía como indispensable para el funcionamiento de todo ecosistema.  A continuación, se identificarán los principales ecosistemas, atendiendo no sólo al elemento energético, sino también otros tópicos como: el aspecto geográfico que implica el clima, comunidades bióticas y elementos abióticos, los cuales mezclados forman sistemas complejos y dinámicos constituyentes de la naturaleza en sí.
Se tratará de listar y caracterizar en forma breve las principales formas ecológicas o los tipos de ecosistemas fácilmente reconocibles.
Entre los ecosistemas acuáticos se pueden identificar los siguientes:
En este tipo de ecosistema los factores físicos determinan la vida . Desde el punto de vista energético disponen de auxilios provenientes de las mareas, olas, corrientes frías o calientes, salinidad, temperatura, intensidad luminosa .Estos aspectos influyen en la composición de las sustancias alimenticias propias de estos ecosistemas, como también en el comportamiento, desarrollo e interrelaciones de los organismos.
Las cadenas alimenticias marinas se inician con el fitoplancton y el zooplancton y terminan con animales grandes como tiburones, calamares, y peces grandes, lógicamente con eslabones intermedios como son los animales medianos
Los océanos cubren casi tres cuartas partes de la superficie terrestre. La vida se extiende hasta sus zonas más profundas, pero los organismos fotosínteticos se limitan a las zonas superiores iluminadas. El mar tiene una profundidad media de 3 km y , excepto por una fracción relativamente pequeña de la superficie, es oscuro y frío. Por consiguiente la mayor parte de su volumen es habitado por bacterias, hongos y animales, y no por plantas.
Hay dos divisiones principales de la vida en el océano abierto: la pelágica  ( de flotación libre) y la bentónica (habitante del fondo). Un componente principal de ladivisión pelágica es el plancton (fito y zooplacton) Está compuesto por algas, protistas, pequeños camarones, huevos y larvas de muchos peces e invertebrados. Ladivisión bentónica contiene los animales sésiles, tales como esponjas, anémonas de mar, almejas y muchos animales móviles, tales como gusanos, estrellas de mar, moluscos, crustáceos y peces

ecosistema polar


Los ecosistemas polares tienen plantas y animales que sobreviven en algunas de
las condiciones más extremas del mundo. Los mares que rodean la Antártica son
ricos en plancton, que sostienen una rica cadena de alimentos marinos; por otra
parte, el Ártico mantiene numerosos mamíferos y desempeña una función
importante en el ciclo anual de las aves migratorias. La diversidad biológica del
Ártico es fundamental para el sustento de los pueblos árticos.

Vulnerabilidad al cambio climático
Actualmente las regiones polares experimentan uno de los cambios climáticos
más rápidos y severos de la Tierra, lo que contribuirá a cambios ambientales y
socioeconómicos, muchos de los cuales ya han comenzado a sentirse.